Comportamiento Humano Volúmen 1.3






Solo una noche más: porque despedirse es bastante depresivo, por eso una noche más, solo eso, una noche más, por los viejos tiempos, por los buenos años, por los que vendrán. Hoy levantemos nuestras copas, brindemos hasta que caigamos, hundidos en alcohol, hundidos en pasión, porque hoy me encuentro, inusualmente, con deseos de pasión, con deseos de despedirme a lo grande.
Y sin más preámbulos, levanto mi trago, lo alzo y un suspiro muere ahogado en él, y para recordar este momento me llevo el humo de tu cigarrillo en mis pulmones.
Olvidemos viejos rencores, la vez que me rompiste en mil pedazos el corazón queda totalmente olvidada, aquella otra que me descubriste con tu mejor amiga en nuestra cama ya ni la recuerdo, brindo por las veces que encontramos calor en brazos de otras personas y no nos enteramos, brindo por esa vez que me dejaste, por la última, cuando te fuiste y te llevaste mis discos, brindo también por los buenos momentos, por esa vez que firmaste y dijiste “acepto”, por aquella otra vez cuando el médico nos felicitó, brindo por la vez que te canté una serenata desnudo en la puerta de tu casa y por todas esas serenatas en la bañadera.
Quisiera brindar por más buenos momentos, pero la verdad es que fueron muy pocos, quisiera tener buenos motivos para no olvidarte nunca, pero solo tengo malos motivos, y por eso brindo, porque sos cruelmente inolvidable, porque me recordás al apocalipsis, porque los momentos a tu lado solo condujeron a la destrucción, por eso nunca te voy a olvidar, porque vos no me olvidaste, y porque no podés hacerlo, ¡Cómo me vas a extrañar!
Ahora, que me voy, justo te vengo a encontrar, parece como que el destino nos une para compartir los peores momentos, me hubiese gustado mucho que también hubiéramos compartido las cosas lindas que me pasaron, pero siempre había una historia con tu hermana, o con el doctor, y siempre te creí.
Me hubiese gustado que hubieras estado a mi lado, en serio, pero ahora que sé lo egoísta que sos, no sabés como me alegra que me hayas dejado y que no hubieras estado cuando te necesité, la verdad es que me parece mentira que pobre de escrúpulos que sos, por eso brindo con vos, porque sos asquerosamente inescrupulosa, y encima te creí, siempre es un placer brindar con tu copa, porque siempre tomás y te ponés más caprichosa.
Voy a disfrutar cuando dentro de un rato escuche tus gemidos, porque me divierte que te excites tanto y ni siquiera me des placer, siempre fuiste igual, nunca vas a conocer los placeres que existen, lástima que ya me voy, por ahí con un poco más de tiempo, te hubiese dejado disfrutar de mi, pero no vales la pena, porque sos caprichosa, egoísta, inescrupulosa y me das lástima. Aunque tengas toda la culpa, hoy brindo con vos, por nosotros, porque la vida te sonría, y puedas aprender muchas cosas, por que puedas conseguir a alguien a quien joder (ahora que me voy), porque recibas lo que te merecés, mejor dicho, no te merecés nada, así que ni siquiera vas a recibir tu merecido, brindo, ahora que se está yendo la oscuridad, brindo, ahora que me cansé de sentir tu aliento agitado, ahora que me cansé de escucharte, y me voy, antes de que descubran mi ausencia, antes de que puedan detenerme.
Por ahí voy bien, donde voy no existe el peligro, donde voy, no tengo que preocuparme por el futuro, donde voy no existe el egoísmo, porque ahí, solo hay paz, porque ahí, no permiten a la gente como vos, por eso sé que estoy seguro, porque nadie va a volver a engañarme, nadie me va a consumir, de frente a la oscuridad, sin más equipaje, que lo que puede verse, con el viento a favor y con todos estos tragos emprendo mi rumbo, y sin palabras de despedida brindo por el final del trayecto, solo una noche que recién termina, y por el nuevo día que vendrá, brindo.
Nota: Esta es una transcripción de una carta firmada por El Articulador, agradecemos a la señora que la trajo hasta nuestra redacción, y pedimos a los familiares de la misma que por favor se la lleven de aquí, ya que nuestros empleados ha contraído heridas profundas en sus zonas genitales desde la llegada de la misma.
El Editor.